Ad portas de fortalecer la investigación clínica, junto a la Universidad Andrés Bello, a través de su Facultad de Ciencias Biológicas.
Nuestro Servicio de Ginecología recientemente aumentó su dotación de médicos para dar mayor cobertura, a la vez que robustece su línea investigativa.

Como Jefe del Servicio de Ginecología de Clínica Indisa desde 1993, el Dr. Víctor Rubio ha sido testigo y protagonista de muchos de los cambios en el plan de crecimiento de este establecimiento con rol asistencial y docente, y comenta con satisfacción los recientes cambios en la expansión y liderazgo de su Unidad. Y es que recientemente, los servicios “De la Mujer” se trasladaron al piso 2 en la torre C de Indisa, de la mano de una fuerte expansión en dotación clínica, equipamientos y cobertura, con metas que esperan cumplir en el mediano plazo.
“Con el cambio, pasamos de tener 50 a 60 profesionales en nuestro Servicio y aumentamos de 12 a 18 box de atención, ampliación que se suma a la incorporación de nuevos equipos y más boxes de atención en ultrasonido, un área que trabaja muy de la mano nuestra”, explica el Dr. Rubio.
El Servicio de Ginecología de Indisa atiende 430 partos cada mes y con la expansión de la oferta de horas y capacidad de atención, esperan alcanzar hasta un 10% de aumento en esta cifra. El cambio ha dado pie para mejorar convenios con isapres y atender más oportunamente la demanda de horas de especialistas de la ginecología.
Del mismo modo, explica Rubio, se han definido subespecialidades como es medicina perinatal, medicina reproductiva, patología de piso pélvico y oncología ginecológica, entre otras.
Actualmente, los ginecólogos son los únicos especialistas que permanecen con consultas en la Clínica, por la naturaleza de su especialidad y la urgencias obstétricas que requieren estar muy cerca de pabellones, hoy a solo dos pisos. “Acá hay un clima muy grato de trabajo, sin conflictos ni competencias. Tenemos buenos especialistas en neonatología e imagenología, lo que nos ayuda a seguir creciendo con confianza y con paso firme”, añade.
De seguro, el próximo salto será la inauguración de Indisa Maipú , que incluirá maternidad con los 4 servicios básicos y con Urgencias. La idea de esta primera expansión es crear un equipo sólido y maduro, que permita cubrir a ambos establecimientos, de modo tal que se acceda a la misma calidad de servicios y profesionales en ambas sedes.
ABRIENDO UNA LÍNEA DE INVESTIGACIÓN
Si bien la docencia es un aspecto importante para este servicio, el Dr. Rubio comenta que junto a UNAB han habido experiencias aisladas en pre y post grado, susceptible de perfeccionar en el futuro e incorporar rotaciones en ciertas subespecialidades. “Y es que la ginecología es una especialidad muy sensible como para abordar la docencia. En la consulta se realizan procedimientos muy íntimos para la mujer e incluso la conversación con ella o con parejas, suele involucrar aspectos como comunicación y sexualidad, aspectos muy delicados en las que debemos procurar mucho respeto, confianza y discreción”, explica el médico.
Pese al reestudio de las variables que determinan un eventual programa de docencia, el Servicio de Ginecología de Indisa ya ha iniciado avances para iniciar la línea investigativa clínica, que sin duda aprovechará la amplia casuística del Servicio. “Este es un proyecto que nos entusiasma. Nos enriquece estar en la avanzada del conocimiento, nos saca de la rutina y nos ayuda a estar actualizándonos permanentemente, lo que siempre tiene buen impacto en el tratamiento de nuestros pacientes”, sostiene. Y en este sentido, el especialista señala que ya están investigando para determinar la presencia de hormonas tiroideas en orina, lo que sin duda sería un plus, menos invasivo, que eliminaría el requisito de muestra sanguínea.
“DE CORAZÓN, CREO QUE VALE LA PENA CONFIAR EN LA AMCI”
Para Víctor Rubio, gracias a las gestiones de AMCI, la alianza con UNAB de seguro ayudará a mejorar protocolos clínicos y sin duda ya ha sido de gran ayuda el acceso a revisión bibliográfica clínica en línea, para fortalecer al equipo profesional que respalda a su Servicio. Ello, sumado a un programa de reuniones clínicas mensuales de Servicio y otras de equipos de subespecialistas, ayudarán a robustecer la propuesta en aspectos de calidad, profesionalismo y rigurosidad.
En su opinión, en los últimos 10 años, la de AMCI ha construido mayor confianza con los médicos y con la Dirección y gerencia, disponiendo de profesionales muy idóneos. Se ha perfeccionado la relación con su postura sólida que ha permitido el avance en asuntos muy relevantes que ayudan a reforzar la confianza del grupo de médicos. “Es una especie de contralor en el pago razonable y oportuno, y en la gestión de beneficios. Es sin duda muy eficiente y creíble. Nadie cuestiona que hay más beneficios en estar dentro que fuera de ella, y estoy muy satisfecho con su alineación con nuevos énfasis en investigación y docencia. De corazón, creo que vale la pena creer y confiar en la AMCI”.
El Dr. Rubio cuenta que hasta 1992 Indisa era una clínica que solo funcionaba en la torre A y era un sueño pensar en la maternidad. Señala que conoce desde su gestación este proyecto con solo 30 partos mensuales en un inicio. En 2007, se inauguró la torre B y en 2013 la torre C, sumándose los edificios de Los Españoles y Los Conquistadores. “Hoy este es un hospital privado completo, docente-asistencial, con gente de prestigio y muy idónea. Partimos con 12 ginecólogos y estoy contento por lo que hemos crecido junto con la clínica y la visión de la Dirección. Por mi Servicio, solo falta el despegue de la investigación y la incorporación de docencia en Urgencia quizás”, señala Rubio.
Este médico ginecólogo inició su trayecto en la salud en el Hospital de Achao, en Chiloé, albores que asegura lo marcaron como profesional, siendo una experiencia decisiva para su desarrollo. Más tarde trabajaría en el Hospital San José por 30 años, para terminar como jefe de ginecología en Indisa. Confiesa que se enamoró de esta especialidad en el Hospital San Juan de Dios, con médicos muy comprometidos socialmente y en su rol docente. “Sobre la ginecología, me encanta el desafío de decidir rápidamente combinando las habilidades quirúrgicas y de medicina interna. Me apasiona el binomio madre-hijo, las patologías del feto, en fin…es una especialidad que se ha dio renovando con tecnologías y abre grandes oportunidades la mujer en su ciclo de vida. Trabajamos en una situación vital que requiere mucha calidez, espíritu que tratamos de transmitir a nuestro equipo de trabajo, aún más ahora que estamos en plan de crecimiento corporativo”, finaliza.