“El aprendizaje recíproco y la construcción de redes de apoyo interdisciplinario, constituyen los pilares fundamentales del equipo de gastroenterología.”

[dropcap color=”color”]L [/dropcap] a Dra. Loreto Ovalle llegó hace varios años a Indisa, cuando estaba finalizando su beca en el Hospital San Juan de Dios de Quinta Normal. Fue entonces cuando un prestigiado médico de esta Clínica, le propuso reemplazarlo mientras él se especializaba en el extranjero…y no se alejó más. La Dra. Ovalle afirma que toda su vida ha estado en el Hospital San Juan de Dios, de hecho ahí nació, luego se formó como médico y como gastroenteróloga, y todo el cariño que le tiene a la salud pública, sólo lo ha compartido con nuestra Clínica. La principal razón para ella, es que ha logrado sentirse parte de un equipo muy cohesionado. “Tenemos un equipo de profesionales de primer nivel, orientados a objetivos comunes, que se traducen en entregar a nuestros pacientes la mejor medicina, sustentado por una buena relación médico-paciente, el buen trabajo en equipo y apoyo logístico”.
La doctora Ovalle recuerda que al llegar a Indisa, como clínica familiar, ésta era muy pequeña y había no más de 3 gastroenterólogos, mientras que hoy ya suman 10. Reconoce que como médico internista, le gustó la idea de especializarse en gastroenterología, dado que como especialidad involucra a muchos órganos, lo que amplía y diversifica el campo de acción y los desafíos cotidianos por enfrentar.
Por un año se especializó en Alemania en endoscopía terapéutica y aunque hoy divide su tiempo entre el Hospital San Juan de Dios e Indisa, siente que en ambos espacios realiza cosas complementarias y de mutuo enriquecimiento.
La Dra. Ovalle enfatiza que esta Clínica cuenta con las distintas especialidades de la gastroenterología, tales como hepatología, enfermedades del tubo digestivo (enfermedades inflamatorias intestinales), trastornos neuro-digestivos (colon irritable) y endoscopía digestiva, tanto diagnóstica como terapeútica, entre otros.
A quienes se integran al equipo, se les incentiva el aprendizaje recíproco, la retroalimentación con buenas ideas, la docencia y la investigación, que ayuda a ampliar la capacidad de  diagnóstico y tratamiento de los pacientes.
Para ella, la medicina es un constante desafío: “Se debe estar atento a nuevos conocimientos, tecnología y trabajar mano a mano con otras áreas de la medicina complementarias a la gastroenterología, como por ejemplo Cirugía e Imagenología”.
Sonriente y siempre optimista, la Dra. Ovalle confiesa: “Me encanta la gastroenterología. Siento que la medicina es como un arte, una constante innovación y acto de creación, así como el pintor va descubriendo colores, los combina y genera algo nuevo; los médicos mezclamos síntomas, signos y sentimientos, con lo que llegamos finalmente a un diagnóstico, lo cual, nos permite dar un adecuado tratamiento”.
 

“Hemos logrado un engranaje multidisciplinario”

[dropcap color=”color”]M [/dropcap] uy de la mano del equipo de gastroenterología, el Dr. Juan Carlos Ayala, cirujano especialista en terapéutica endoscópica de Indisa, cumple un rol relevante al incorporar esta disciplina, que permite realizar operaciones a través de orificios naturales del cuerpo humano, ya sea para tratar tumores, hemorragias, extraer cuerpos extraños, cálculos biliares, pancreáticos y cánceres del tubo digestivo.
Para el especialista, este procedimiento ha cobrado cada vez mayor protagonismo y Chile es líder en la formación de este tipo de expertos. Por mucho tiempo, comenta Ayala, cirujanos, gastroenterólogos y oncólogos de todo el mundo, vinieron a nuestro país a especializarse en el centro de Entrenamiento de Terapéutica Endoscópica, liderado por el Dr. Claudio Navarrete y por ello se posicionó hasta consolidarse entre los líderes. Actualmente, Indisa sigue la misma línea, con la introducción de nuevas técnicas e instrumental especializado y la inclusión de este procedimiento como una alternativa muy asertiva.
“Las ventajas de la cirugía endoscópica es que no deja cicatriz y la recuperación del paciente es mucho más amigable, ya que no hay incisión como sucede en cirugías mayores e incluso, las mínimamente invasivas. Como en todo procedimiento quirúrgico, independiente de la vía de abordaje, el riesgo de complicaciones  siempre está presente, pero con las técnicas adecuadas y los equipos que actualmente poseemos en Indisa, este riesgo se disminuye notablemente, sobre todo en la realización de la Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica, la cual continúa siendo el procedimiento más complejo que se pueda realizar en el campo de la endoscopía en general”, explica el experto.
A sus 50 años, el Dr. Ayala lleva 19 dedicados a esta práctica de la medicina y sus intervenciones más recurrentes son en casos de patologías de la vía biliar, colédoco, cálculos y tumores. Su trabajo está muy vinculado al de pacientes manejados por traumatólogos, internistas, cirujanos y oncólogos; siendo este tipo de procedimiento, también una buena alternativa para evitar duplicidad de riesgos y costos, en casos de cirugías que se han complicado y que ameritan una nueva intervención.
Con un acento encantador y amante de la pesca con mosca en el sur de Chile, el Dr. Juan Carlos Ayala proviene de Colombia. Estudió medicina en la Universidad Libre de Cali y su beca de cirugía general la realizó en la Universidad de Valparaíso. En 1996 regresó al país cafetero, y trabajó por algunos años junto a su padre cirujano, para luego retornar en el 2000 –por razones de seguridad- junto a su familia, en cuestión de horas. Hoy, con 32 años con su esposa y tres hijos, dos de ellos nacidos en Chile, siente que su identidad tiene una mezcla perfecta entre costumbres y modismos de ambas culturas, pero por sobre todo, siente mucho afecto por la gente que lo ha acogido a lo largo de estos años en sus diferentes sitios de trabajo, como fueron la Posta Central, el Hospital de Carabineros y ahora, de exclusividad, nuestra Clínica Indisa.
“Me siento a gusto en este lugar. Hemos logrado un engranaje multidisciplinario y un clima de trabajo agradable, con resultados muy buenos. Cada año, nos ponemos metas, publicamos trabajos científicos y generamos protocolos. Nos complementamos como equipo y nos potenciamos individualmente, así hay trabajo y oportunidades para todos, y la institución también crece junto a nuestro equipo”, finaliza.