El Doctor Gerardo Mordojovich, cirujano de tórax y miembro de Indisa desde 2011, explica cómo una cirugía poco invasiva ha logrado mejorar la calidad de vida de más de 50 pacientes, experiencia que será compartida en 2018 a través de un estudio científico.

La hiperhidrosis es una enfermedad caracterizada por la sudoración excesiva del paciente, afectando su autoestima y su desenvolvimiento social y laboral, pero no muchos saben que tiene tratamiento definitivo a través de una cirugía sencilla, que se realiza en Indisa desde el 2011. El cirujano torácico Dr. Gerardo Mordojovich, junto a su equipo liderado por el Dr. Rafael Prat, ya suma 53 intervenciones exitosas que serán difundidas en un estudio científico en 2018.
La prevalencia de este diagnóstico es entre un 1 y 2 por ciento de la población, que aunque no es significativo, es muy molesto para quien lo padece. El Dr. Mordojovich explica que la Hiperhidrosis se manifiesta en edades precoces de la vida, en adolescentes, y la gente nunca se atreve a consultar, en el fondo; o no conocen que hay una resolución quirúrgica, o consultan a otros especialistas que ofrecen tratamientos que no demuestran efectividad definitiva.
Hace 6 años, en Indisa se realiza la simpatectomía, una intervención quirúrgica que tiene riesgos menores al 1%, como son sangrado, infecciones y en el caso de cirugía a nivel de cráneo, la posibilidad de desarrollar un síndrome Horner –en la mayoría de los casos, reversible- que produce una alteración en el ojo y sucede en un 0.4% de los casos.
En Indisa, mediante video cirugía, se trata la hiperhidrosis de cara, cuero cabelludo, el rubor facial, la hipersudoración de las axilas y la de las manos. Mordojovich señala: “En la cirugía, uno pide al anestesista que colapse el pulmón, mientras tanto oxigena la sangre del paciente con el otro pulmón. Se busca el nervio y se secciona. Por lo general, cortamos sobre la segunda costilla, para problemas de la cara; en la tercera cosilla, para problemas de las manos; y en la cuarta costilla, para problemas de la axila. Luego, los pacientes despiertan sin drenaje, con dos incisiones, y se va de alta al día siguiente”.
El especialista comenta que han logrado consolidar un equipo muy afiatado en estos años. Todos son cirujanos torácicos que tratan además de la hiperhidrosis, oncología torácica, cirugía del diafragma, entre otros.
Por un error de la medicina, en los años 20, tratando de resolver problemas vasculares, se cortó accidentalmente el nervio simpático, observándose la disminución en la sudoración de algunos pacientes que ni imaginaban que padecían hiperhidrosis en aquellos tiempos. En 1985, sin embargo, cuando aparece la video cirugía, los cirujanos torácicos empezaron a explorar en la cavidad torácica y fácilmente encontraron el nervio simpático junto a la columna vertebral, iniciando esta técnica.
Actualmente, la simpatectomía es entrenada en los cirujanos en formación. “Este descubrimiento, hoy nos permite mejorar la calidad de vida de los pacientes con hiperhidrosis. Tiene cobertura por las Isapres, ya que no es considerada una cirugía estética”, añade el cirujano.
UN APORTE A LA INVESTIGACIÓN
Desde 2012, el Dr. Mordojovich es parte de AMCI y en estos años ha visto con satisfacción sus logros y los beneficios para sus socios. Un aspecto especial en su evolución es su propósito de colaborar en el desarrollo científico como Indisa, y en este sentido; para 2018 planea junto a su equipo, publicar un estudio acerca de la experiencia en el tratamiento de la hiperhidrosis mediante simpatectomía, en un total de 53 pacientes; que incluirá una encuesta de satisfacción de los usuarios sometidos a la cirugía, respetando sus derechos de confidencialidad y propiedad de sus datos clínicos como pacientes.
“AMCI está adquiriendo cada vez más vuelo dentro de la clínica. Creo que nos estamos posicionando como grupo médico, para ser respetados y valorados. Y eso a la vez crea un círculo virtuoso, de satisfacción compartida entre los médicos y la organización”, explica Mordojovich. Este tipo de estudios –añade- ayuda a divulgar nuestra experiencia y a relacionarnos con otras especialidades, además de dermatología y endocrinología, que son las áreas que derivan este perfil de pacientes.
La simpatectomía es una cirugía que es radical, definitiva e irreversible. Eso lo tienen que saber bien los pacientes antes de la operación. “Nosotros cortamos el estímulo nervioso, por lo tanto, ahí deja de pasar información y esto no tiene vuelta. Otros tratamientos como las inyecciones con botox son también una alternativa para la hiperhidrosis axilar, pero incluye dolorosas inyecciones y una efectividad que no supera los 3 meses”, puntualiza.
La simpatectomía también será presentada como proyecto al área comercial de Indisa, de modo de fortalecer su difusión mediante herramientas de marketing durante el año próximo. Un significativo paso en innovación y un aporte a la comunidad científica.