El seguro de responsabilidad civil protege a médicos cirujano, cirujanos dentistas y enfermeras, que en su desempeño están expuestos a condiciones especiales que vulneran la integridad de un paciente. El seguro de responsabilidad civil permite que el médico traspase el riesgo de su praxis a una compañía de seguros, aportando capital para una eventual indemnización y/o defensoría.

Con la participación de más de 100 médicos, AMCI realizó una nueva charla del ciclo “Educación Financiera y Tributaria”, esta vez sobre Seguros de Responsabilidad Civil, a cargo de Luis Alberto Etchepare, gerente general de EyH Seguros, con 21 años de trayectoria profesional, más de 55 clínicas aseguradas en Chile y sobre 7 mil médicos protegidos.

A modo de anfitrión, el Dr. Milton Quijada, director de AMCI, dio la bienvenida a esta segunda exposición sobre un tema tan sensible como es la eventual demanda civil por malas prácticas de la medicina y las medidas de protección que ofrece el mercado de seguros para respaldarnos ante esta eventualidad. “Al igual que otras actividades que realizamos junto a agrupaciones de médicos de la salud privada, esta charla busca educarnos desde un aspecto técnico sobre este tipo de polizas los procesos que involucra y los aspectos reputacionales que implica vivir esta lamentable situación. Para ello nos hemos asesorado de expertos para aprender sobre este tema y desde ya agradezco la colaboración organizativa del equipo AMCI, liderado por su gerente Luis Torres”.

El seguro de responsabilidad civil permite que el médico traspase el riesgo a una compañía de seguros, aportando capital para una eventual indemnización y un sistema de defensa en caso de error, negligencia o equivocación al momento de prestar servicios propios de la profesión en el territorio nacional.

“El seguro de responsabilidad civil protege a profesiones de alto riesgo como son médicos cirujano, cirujanos dentistas y enfermeras, que en su desempeño están expuestos a condiciones especiales que vulneran a un paciente. Consideraciones particulares tienen las especialidades de psiquiatría y cirugía plástica, la primera porque es difícil establecer el momento de alta del paciente y la segunda, porque se expone al criterio de expectativas del paciente”, explicó Etchepare. La medicina intervencionista, la cirugía cardiaca, la neurocirugía, son solo algunas de las subespecialidades que requieren más de un seguro de protección para indemnizar al paciente o a su familiares directos en caso de muerte, aumentando la cobertura de 180 a 550 millones.

A modo de referencia, este seguro tiene una cobertura de 7 mil UF y su costo es de 7,5 UF anual, incluyendo un deducible que atiende los gastos de un eventual acuerdo para evitar un juicio. El seguro se puede contratar a través de una sociedad médica o agrupación médica, y la recomendación principalmente para aquellas especialidades de mayor riesgo, es contratar varios seguros simultáneamente, ya que la cobertura se suma.

“En Chile se venden dos tipos de seguros. Uno establece que el médico deberá denunciar el posible hecho dentro de la vigencia de la póliza, mientras que el otro (nuestra propuesta) implica que en cuanto tome conocimiento del hecho, corre la póliza. Los actos civiles prescriben al cabo de 5 años y debemos considerar que el seguro cubre costos de procesos judiciales, procesales y penales. Actualmente, nadie puede demandar sin un comparendo previo y nuestro consejo es siempre llegar a acuerdo en ese contexto”, sostiene el expositor.

Luis Alberto explica que cuando se denuncia un hecho, “se analizan los detalles, la epicrisis, y si vemos que no hay causa, los abogados van a pelear por su defendido alegando inocencia; pero si según el análisis, vemos que hay otros fallos que lo conduzcan a la culpabilidad, vamos a negociar un acuerdo excepcional por el actuar profesional”.

No existen limitaciones de edad para contratar este seguro y también cubre la práctica de la telemedicina. Las demandas pueden afectar solo al profesional, solo a la institución en la que trabaja, o a ambos; y en todos los casos existen instrumentos para su protección. En todos ellos, solo se asegura la práctica profesional, pero no la reputación dañada.

“La mayor parte de las demandas acusan negligencia y eso no corresponde. Generalmente lo que sucede es un error de diagnóstico o una equivocación médica en la decisión del procedimiento. Las pólizas permiten cubrir las tres condiciones”, explica el especialista.

Luego de una activa sesión de preguntas a cargo del moderador Richard Haensel, abogado tributario, también se aclaró la diferencia de la póliza de FALMED, que indemniza contra sentencia ejecutoriada y eso implica experimentar un juicio completo,  y en caso de culpabilidad, siempre es mejor llegar a un buen arreglo y no exponer al profesional al desgaste que esto significa.

Este ciclo de charla seguirá con el tema “Protección Patrimonial”, agendada  para el miércoles 30 de septiembre, a las 19:30 horas. Los esperamos!

Si quieres revivir la charla sobre Seguros de Responsabilidad Civil.